CONVERSAMOS CON SERGIO ISRAEL, AUTOR DE “PEPE MUJICA. EL PRESIDENTE. UNA INVESTIGACIÓN NO AUTORIZADA”.
¿Qué es Mujica? ¿Un anarquista que agarró la changa de ser presidente, un estadista sui generis? Conversamos con el periodista Sergio Israel, autor del libro “Pepe Mujica. El presidente. Una investigación no autorizada”.
El presidente José Mujica es una celebridad internacional. Ese hecho irrefutable se vio afianzado en los últimos dos años, primero gracias a su intervención en Rio+20 -que tiene más de dos millones de visitas en Youtube- y luego tras el espaldarazo que dieron al gobierno la despenalización del aborto, la aprobación del matrimonio igualitario y la ley que regula el mercado de la marihuana.
Esas medidas, sumadas a su historia personal y su atípico -para los estándares de los mandatarios del resto del globo- modo de vida, lo volvieron una estrella pop irresistible para la prensa del mundo entero. Europeos, americanos y asiáticos llegaron a Rincón del Cerro para ver cómo es, cómo vive y qué piensa Pepe Mujica, "el presidente más pobre del mundo", que tuvo que "agarrar la changa" de dirigir un país "porque no le quedaba otra".
Puertas adentro, la realidad es menos pintoresca. Para los uruguayos, Mujica no es el guerrillero que anda en un Fusca y no tiene servidumbre. Es el presidente. O es todo eso, pero además le tocó ser elegido como cabeza de un partido político con adherentes y detractores para conducir los destinos de la nación. Nada menos.
Un presidente que, al día de hoy, supera el 50 % de popularidad y aprobación de su gestión, y que logra descolocar a propios y ajenos con sus salidas y declaraciones, a veces extemporáneas.
El periodista Sergio Israel, que ya escribió sobre las otras facetas de Mujica ("Mujica, el florista presidente", Fin de Siglo), tomó la empresa de ensayar una suerte de balance de la etapa actual: "Pepe Mujica. El presidente. Una investigación no autorizada" (Planeta, 2014) es una aproximación a la aún incompleta administración Mujica desde el punto de vista de la gestión, y las luces y sombras de sus avatares políticos.
A través de más de 300 páginas y varios capítulos, Israel analiza, sin apresurar conclusiones, los puntos sobresalientes del gobierno de Mujica, desde su papel en buena medida exitoso en política internacional, hasta el controvertido final de Pluna, la salida de Jorge Setelich de AFE y de Conrado Ramos de la OPP, el "escape" de Luis Almagro y la unánime resistencia de su entorno a Diego Cánepa.
El trabajo de Israel es profundo pero no definitivo, y todo juicio es provisorio: no habrá veredicto final ni hoy ni en dos meses, cuando las urnas digan que, para Mujica, terminó el tiempo de la changa y haya que pasarle la banda presidencial a otro que, seguro, no la tendrá fácil.
http://www.montevideo.com.uy
No hay comentarios.:
Publicar un comentario