Un total de 1.000 niños de 105 escuelas rurales de todo el país visitaron el Auditorio Adela Reta para presenciar “Don Quijote”, un espectáculo de danza interpretado por el Ballet Nacional del SODRE.
Más de 30 autobuses con niños provenientes de las localidades más lejanas de todos los departamentos del país, incluyendo Montevideo rural, visitaron la capital y presenciaron una función especial de “Don Quijote” del Ballet Nacional del SODRE.
Los niños asisten a escuelas rurales de las localidades de Quebradas del Norte, Palma Sola, Sarandí de Yacuy, Coronado, Laureles, Cañas Poblado 33, Cuchilla de Laureles, Lambaré, Amarillo, Grutas del Palacio, Cuchillas Villasboas, Bellaco, Valizas, Aguas Dulces, Costa del Tala, Queguay Chico, Colonia Pintos Viana, Paso de Las Piedras, Rincón del Pino o Cuchilla de Sierra.
En la función dirigida a escolares estaban presentes los representantes de las instituciones organizadoras: Ministerio de Educación y Cultura, Consejo Directivo del SODRE, Auditorio Nacional del SODRE, Oficina de Planeamiento y Presupuesto, y el Consejo de Educación Inicial y Primaria de la Fundación PROSODRE.
La función reunió a la familia rural de diferentes localidades de todos los departamentos del país.
Un mundo de imaginación y posibilidades infinitas
Por su parte el director artístico del Ballet Nacional del SODRE, Julio Bocca, dijo que “es algo maravilloso que los niños tengan la posibilidad de no solo ver un gran ballet, sino también ver movimiento, música, arquitectura, vestuario, iluminación. Se abren un mundo de imaginación y posibilidades infinitas”.
En tanto que el director general del Auditorio Adela Reta, Gerardo Grieco, informó que “Don Quijote” es la producción “más grande que se realizó este año en el Auditorio, con más de 20.000 entradas vendidas y localidades agotadas”.
Ha sido un proyecto “simbólico”, la visión del “Uruguay que soñamos, nos muestra que es posible la más alta calidad trabajando en colaboración y en red, buscando la excelencia, y dando mensajes de valor a la sociedad”, se indicó desde el SODRE.
Al finalizar el espectáculo los niños ovacionaron a los bailarines de pie, lo que provocó la emoción del cuerpo de baile.
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