En su primer discurso después de conocerse la victoria en el balotaje argentino para la Presidencia de la Nación, Mauricio Macri anunció su intención desarrollar una “agenda de cooperación” con los países “hermanos” latinoamericanos.
Tras dedicar unos instantes a la “pobreza cero” y la lucha contra el narcotráfico como pautas centrales del Gobierno que asumirá el 10 de diciembre, Macri refirió a la región. “A los hermanos de Latinoamérica les quiero decir que queremos tener buenas relaciones con todos los países. Esperamos encontrar una agenda de cooperación”, dijo en su bunker del Complejo Costa Salguero, donde recibió la noticia confirmándolo como futuro primer mandatario de la nación. “Hoy es un día histórico. Es un cambio de época”, aseguró el novel presidente.
Se trata del primer arribo al poder por la vía de elecciones de un partido netamente de la derecha argentina, que además concentrará una cantidad inédita de poder. El PRO gobernará el Estado nacional, el gobierno de Buenos Aires (provincia) y el gobierno autónomo de la Ciudad capital.
La vicepresidenta electa Gabriela Michetti, reconoció por su parte que desde los sectores populares se puede temer por aspectos del futuro con Macri al frente, e intentó calmar esas expectativas negativas. “Sé que hay muchos lugares de gente humilde con sensaciones de temor. Vamos a trabajar muy especialmente para ustedes. Cada decisión que el nuevo gobierno tome, va a ser para que estemos mejor. Necesitamos paz, más amor entre nosotros, más unión”, dijo la novel mandataria, durante el discurso con que anticipó la entrada de su líder al escenario: “Les presento al presidente”, lo anunció.
“La Argentina que soñamos no va a ser fruto de un iluminado. La vamos a conseguir si cada uno encuentra el camino del desarrollo personal. Esa es mi tarea. Ayudarlos a encontrar ese camino”, dijo en su primer discurso Macri, apostando al desarrollo individual, pero sin mayores detalles.
Pidiendo a Dios que “los ilumine” a los argentinos, les recordó que “nuestros padres cruzaron un océano sin tener Facebook ni Twitter y construyeron una etapa maravillosa de la Argentina. Nos toca continuar esa posta”, sentenció.
Pidiendo a sus compatriotas “que no me abandonen”, Macri se dedicó de inmediato en medio de una lluvia de papel picado y globos, a realizar su consabido baile.
Los resultados a las 7 de la mañana del lunes mostraban un 51,4% de los votos para Macri (unos 12:903.400 votos), y un 48,6% para Scioli (12:197.900).
Macri logró así cuatro millones más de votos que en la primera vuelta. “Sos un justo ganador” dijo Scioli al reconocer la derrota.
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