A la vía
La jueza Gloria Seguessa rechazó la demanda que el empresario Fernando Barboni, propietario de Glemby S.A, entabló contra el Estado por 1.000 millones de dólares a causa de la concesión de la Estación de AFE.
El empresario Barboni había presentado la demanda aduciendo que no le entregaron "en tiempo y forma" el edificio de la estación de Central de AFE y su playa de maniobras. Por ese motivo, reclamaba un "lucro cesante" que ascendía a 1040 millones de dólares. En 2001, la empresa de Barboni había pagado 250 mil dólares por la concesión de la estación por 30 años.
Según información que publica el diario La República, "en 2001 Glenby S.A pagó 250.000 dólares tras firmar un acuerdo con Saduf S.A. (una empresa gestionada por el Banco Hipotecario del Uruguay), para que se le concediera la ex estación central de AFE por 30 años, y se le vendió la ex playa de maniobras, donde preveía desarrollar un emprendimiento inmobiliario. Luego de diez años de pleitos, la Suprema Corte de Justicia falló a favor del empresario".
Basándose en esta sentencia del 2011, Barboni solicitó la ejecución de sentencia y reclamó al Estado 1.000 millones de dólares por lucro cesante. "Los abogados del empresario consideraron que el Estado debió entregar la estación y la playa de maniobras dentro de los 30 días siguientes a la resolución del Tribunal de Apelaciones en lo Civil, en noviembre de 2009. Luego, el Estado presentó un recurso de casación ante la Suprema Corte de Justicia (SCJ), la cual también falló a favor de la firma Glenby", indica la nota.
El empresario pretendía que se le entregara esta cifra de dinero en lugar del inmueble, pero una pericia financiera consideró materialmente imposible determinar si el negocio impulsado por Glenby SA hubiera generado las ganancias que reclama el empresario.
Las condiciones de la estación
Meses atrás, el presidente José Mujica había explicado que el estado de abandono en que se encuentra el predio responde a esa situación judicial y recordó que se trata de un "monumento nacional" por su calidad arquitectónica.
"Ese edificio y sus inmediaciones están en un perfecto estado de abandono. Por la sencilla razón de que se arrastra un penoso juicio desde el 2003 por asuntos que vienen de antes, y que ese juicio en contra del interés del Estado, ya fallado en parte por la Justicia, establece una de los más doloroso abandonos en el quehacer jurídico en cuanto a la defensa del interés público, pero que tiene uno de esos resultados en el Estado en que se encuentra ese monumento público", señaló el mandatario.
Mujica contó que el Estado intento negociar con el empresario pero que las propuestas recibidas fueron inaceptables: "Hemos tratado de negociar lo innegociable, y quienes jurídicamente tienen un pleito con el Estado de una severidad y una cuantía que creo que no tiene antecedentes en la jurisprudencia, nos han contestado con cosas como esta: ´ que están dispuestos a negociar porque en definitiva la cifra que se pide al Estado es imposible para el Uruguay y el sentido común, imposible por sus dimensiones. Se nos pide poder hacer un casino, una zona franca, transferir el predio de la Facultad de Veterinaria, transferir el predio de la Escuela naval. En definitiva, arrimar en bonos los mil millones de dólares y un tipo de exigencia que nos deja sin aliento".
"Seguramente esto inscribe uno de los episodios más penosos de la historia del Uruguay, pero pedimos poder cuidar. Ojalá la Justicia nos lo permita. Queremos cuidar lo que queda, más allá del destino, que no sé cuál podrá ser, en un país de Derecho que debe respetar las decisiones jurídicas. Por la vía del reclamo al lucro cesante se cae en una cifra de fantasía imposible para el Uruguay contemporáneo", añadió el presidente que advirtió que no aceptará pagar "siquiera una parte de la semejante fortuna que se nos exige", recordando que "detrás de los juicios que se pierden está el pueblo uruguayo que paga impuestos. De ahí la importancia del asunto".
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Las condiciones de la estación
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