El Premio Nobel de Literatura colombiano, festejó en la intimidad de su casa en México, su cumpleaños 87, pero no dejó por eso de salir a saludar a los vecinos en una fecha tan señalada.
Si bien numerosos periodistas lo esperaban a las puertas de su finca, nadie esperaba que sobre el mediodía García Márquez, vestido de impecable traje, y con una rosa amarilla en el ojal del saco, saliera a la calle para ir a visitar a sus vecinos, lo que dio pie a que los cronistas le entonaran las “Mañanitas” tradicionales para estas ocasiones en México.
Aunque García Márquez no hizo declaraciones, entonó junto a los periodistas algunos fragmentos de la canción, mientras sostenía un ramo de rosas amarillas –su color favorito- y hubo aplausos mutuos de los cronistas y del escritor al fin del homenaje.
En la oportunidad apareció acompañado por una amiga de la familia y por su secretaria, la que repartió mariposas amarillas de papel entre los periodistas.
En Colombia los festejos alcanzaron a todas las ciudades
Más de 29 ciudades colombianas han anunciado que se suman a los festejos por el cumpleaños que se extenderán durante todo el mes de marzo, confirmaron los organizadores del homenaje. El Banco de la República de Colombia, que organiza “Celebrando a Gabo: un clásico vivo”, anunció actos culturales alusivos en todas las principales ciudades del país, donde bibliotecas y museos principalmente serán sede de conferencias y análisis de la obra creativa del ganador del Premio Nobel en 1987.
Gabo, nacido el 6 de marzo de 1927, en Aracataca, una localidad del departamento de Magdalena, en el Caribe, ha agradecido especialmente a su pueblo por estos homenajes, aunque se excusó de no poder de momento hacer el viaje a su tierra natal.
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