El presidente de la República, José Mujica, ratificó este viernes que la seguridad y el clima de convivencia alrededor de una cancha de fútbol “no los tiene que dar la presencia policial, sino sostener la madurez global de la sociedad”.
Mujica, luego de advertir que retirará la guardia policial de los estadios donde jueguen los equipos de Nacional y Peñarol a raíz del aumento de la violencia por parte de las barras bravas, este viernes dijo en su audición radial de M-24 que “la seguridad y el clima de convivencia alrededor de una cancha no los tiene que dar la presencia policial, sino sostener la madurez global de la sociedad”.
“Los hechos de los últimos tiempos son tercos, porfiados, golpean y golpean. No soy ni seré nunca partidario de que los poderes del Estado se inmiscuyan en el deporte, menos en el fútbol, que debe gozar de libre albedrío”, aclaró Mujica.
Resaltó que hay una camada de militantes por sostener el deporte, particularmente el fútbol, que es una tarjeta de identidad para los uruguayos, pero sentenció que “todo tiene límites, y a veces la realidad nos impone sacudones fuertes”.
Mujica aseguró que tiene que comenzar a reaccionar la sociedad y el país, y remarcó que los hechos de violencia que se registraron el pasado miércoles en el Estadio Centenario luego del encuentro entre Nacional y Newell’s Old Boys de Rosario “van debilitando y ensuciando”.
Advirtió que en caso de continuar sucediendo tales hechos “solo quedarán observando la fiesta un puñado de exaltados que asumen una conducta primitiva, por momentos de manada, a veces conducidos por minorías, por esas llamadas barrabravas, que terminan imponiendo un clima de guerra y no de fiesta”.
“No es posible que ese clima de fiesta sea sustituido por un derroche de violencia inútil que torpedea lo mejor del país: la convivencia. Es la hipoteca del respeto común”, expresó el mandatario.
Remarcó que tanto “convivencia” como la “tolerancia en la diversidad” son para Uruguay “valores centrales”.
Pero cuestionó que la sociedad ha “retrocedido bárbaramente”, y añadió que la gente de su generación recordará que “en aquel fútbol de proletarios donde muchos jugadores eran trabajadores a la vez, corrían menos y se divertían más, pero las hinchadas estaban entreveradas”, sin embargo, hoy “tenemos que separarnos como si fuéramos leprosos”.
Añadió que en la actualidad “existen algunos asuntos extrafútbol que se encubren, círculos que tienen tentativa de dominio de actividades y negocios laterales”.
También dijo que a veces hay “contradicciones en la conducta de algunos portavoces de barrabravas y peleas intestinas, seguramente los dirigentes del futbol también lo saben. Eso quiere decir que el que calla otorga”.
Por ello, llegó el tiempo de “no seguir otorgando, llegó el tiempo de poner la verdad, por más fea que sea, arriba de la mesa y enfrentarla, porque el fútbol es demasiado importante para el pueblo uruguayo”, expresó el jefe de Estado.
Se refirió a los dirigentes del fútbol uruguayo, a los que definió como “valiosos”, y “militantes de una pasión nacional”.
Pero indicó que “deben darse cuenta del valor como mensaje para sostener esa identidad nacional que es el fútbol”.
Dijo que el Poder Ejecutivo “quiere llamarle la atención al país y a la política del fútbol”.
“Basta de echarle la culpa a otros. Tenemos una corresponsabilidad como sociedad. Algunos pocos por acción, otros no tan pocos por omisión”, aseguró.
Por tal motivo llamó a encontrar caminos para que la situación de violencia “no siga aconteciendo”, y recordó que en otras partes del mundo se solucionó.
“Es hora de no lavarse las manos y ponerlas en práctica. No podemos morir de ojos abiertos, echarle las culpas a cualquiera, y sacarnos de encima la responsabilidad global que tenemos como sociedad”, remarcó.
Amontonar policías no es solución
Por otro lado, el mandatario se refirió al rol de la Policía.
Dijo que la Policía debe “estar por el margen inevitable de desviaciones delictivas”, como siempre estará presente donde hay multitudes, “pero no para asegurar que la gente no se agreda en su pasión deportiva”.
Porque entiende que “amontonando actores policiales no se soluciona el problema, sino que se exacerba”.
Remarcó que se acude a la Policía en busca de seguridad, pero hay que tener en cuenta que “no hay represión de masas que sea químicamente pura, es francamente imposible, entonces inculpamos a trabajadores que cumplen con su obligación”.
“Tenemos que alejar el delito, la conducta de manada, las reacciones mafiosas, la barbarie, el primitivismo y sustituirlo por un aire de familia, de festividad, de verdadera fiesta deportiva, de alegría en el triunfo y de apenas una sonrisa cachadora con el que pierde, pero jamás una ofensa ni una agresión”, sentenció Mujica.
http://www.lr21.com.uy/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario