A través del programa Acompañamiento Familiar y el trabajo de cercanía, Uruguay Crece Contigo acompañó el desarrollo de 9.397 hogares entre setiembre de 2012 y octubre de 2015 en distintas partes del país. Así, llegó directamente a 4.550 embarazadas y 12.682 niñas y niños. A ello se suman también 26.809 beneficiarios indirectos.
Según el último informe de Uruguay Crece Contigo sobre el programa Acompañamiento Familiar, un 94% de las referentes de las familias atendidas son mujeres. Respecto del nivel educativo de los jefes y jefas de hogar, 80 % declaró tener ciclo básico incompleto o menos años de estudios.
De las embarazadas atendidas, un 53% son adolescentes, mientras que solo el 36% de los referentes tienen entre 15 y 19 años. Un 26% de las mujeres declaró ser afrodescendiente, al igual que el 14% de los niños. De todos los niños atendidos, el 58% tenían menos de un año al inicio de la intervención.
En cuanto a la cantidad de integrantes por hogar, el promedio suma poco más de cuatro. El 30,8% de los casos son biparentales con hijos de ambos y el 25,5% son monoparentales femeninos. A su vez, un 10% de las familias tiene entre sus integrantes alguna persona con discapacidad.
El 61% de las familias atendidas vivían en situación de hacinamiento, en el 28% los jefes de hogar estaban desocupados y en el 47% estos realizaban los quehaceres del hogar.
Mejoras a partir de Uruguay Crece Contigo
Según el seguimiento y evaluación realizados por el programa de Acompañamiento Familiar, “las intervenciones permitieron mejorar la capacidad de las familias para desarrollar buenas prácticas en crianza, también mejoraron las condiciones de salud, nutrición, desarrollo infantil y el acceso a las prestaciones sociales”.
Las familias contaron con apoyo de material para el estímulo del desarrollo de los niños, además de pautas para mejorar la alimentación. Los hijos de las mujeres embarazadas acompañadas alcanzaron los niveles de peso al nacer y prematurez similares al contexto medio nacional.
El diagnóstico efectuado por Uruguay Crece Contigo indica que, entre las situaciones encontradas que denotaban vulnerabilidad social, destacan la falta de acceso al saneamiento (79%), las inundaciones en el hogar cuando llovía (67%), la falta de baño en los domicilios (23%), la inseguridad grave entre adultos (23%) y la inseguridad alimentaria grave entre niños y niñas (19%).
Además, el 42% de los hogares aplicaba pautas de violencia moderada, el 7% pautas de crianza con violencia severa y el 2% muy severa.
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