Apenas horas después de iniciadas las conversaciones de paz entre el gobierno de Damasco y la oposición, ante el mediador de ONU Staffan de Mistura, un fuerte avance de tropas gubernamentales en el norte sirio y el recrudecimiento de los combates llevaron a suspender cualquier negociación.
Mientras los coordinadores de ONU, tras recibir el primer informe de los opositores, se preparaba para hacer lo propios con los gubernamentales (las conversaciones son indirectas y no en una misma mesa), las noticias llegadas a Suiza desde Siria, solamente sirvieron para truncar cualquier esfuerzo. Los opositores se han negado a continuar el diálogo a poco de conocerse que el norte del país fuerzas regulares habían cortado las líneas de suministros que llegan para los rebeldes desde Turquía. La ofensiva ha sido una de las mayores en años y logró cortar el cerco que los opositores mantenían desde hace tres años sobre las localidades de Nubol y Zahraa, logrando recapturar la principal carretera que une Turquía con el norte sirio.
Por su parte, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos -la ONG con sede en Londres que monitorea los pormenores del conflicto- informó que se había constatado un aumento de los bombardeos de la aviación rusa contra las líneas de los rebeldes.
La ONU cree que podrán volverse a negociar a fin de febrero
“Sin dudas que queda mucho trabajo por hacer” ha dicho el ítalo-sueco Staffan de Mistura, mediador de ONU para Siria, quien reconoció que los opositores con los que había dialogado en primer término había dicho que se retiraban de la mesa de paz. Para el diplomático sin embargo el tema es solo un “veto”, una suspensiópn y dijo que el 25 de febrero espera que las partes vuelvan al Palacio de las Naciones de Ginebra (Suiza), para comenzar de lleno la negociación de paz.
Se desconoce de momento si algunos de los “gestos humanitarios” exigidos por los opositores será cumplido por el régimen de Damasco: levantar el sitio a las ciudades donde se registran muertes por inanición, liberación de miles de presos particularmente mujeres y niños y suspensión de los bombardeos en áreas de población civil.
Los observadores interpretan que el avance de las tropas del régimen, con el apoyo ruso, es clara señal de que el alto el fuego está más lejos que nunca y que la solución política reconocida por las partes como la única viable, que establece elecciones libres en Siria para 2017, tampoco parece cerrar para esa fecha.
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