“Paseo a ciegas” es una iniciativa sin fines de lucro que busca generar empatía y entender la realidad de las personas no videntes. “El mayor desafío no es caminar a ciegas, sino enfrentarse a la realidad que vive el otro”, dijo a Montevideo Portal su impulsor.
Como todo montevideano Pablo Buela camina por la Rambla. Por disfrute, para hacer ejercicio, porque queda de camino a su casa o su trabajo. El mar, la playa agarrotada de público los días de verano o las olas que golpean fuerte en invierno forman parte del paisaje hermosamente monótono que se puede ver en la ciudad.
"Un día me pregunté lo difícil que sería caminar por la Rambla si fuese ciego", confesó a Montevideo Portal Pablo Buela.
Comenzó a investigar, conoció a la Unión Nacional de Ciegos del Uruguay (UNCU), se contactó con ellos y así surgió "Paseo a ciegas". A partir de enero todos los jueves la cita es frente al Castillo Pittamiglio.
"Desde ese entonces comenzamos a organizar caminatas por la Rambla de Montevideo. A las personas videntes les tapamos los ojos y acompañados de un bastón caminan del brazo guiadas por un ciego", cuenta el joven emprendedor.
"El objetivo espiritual que persigue la iniciativa es sensibilizarnos y ponernos en el lugar del otro, algo que en la locura del día no hacemos, como preguntarnos: ¿Cómo es la vida del otro?, ¿Qué problemas tienen?, ¿Qué dificultades enfrentan? Esto ha hecho que la experiencia sea muy movilizante", manifestó.
El ritual intenta ser integrador y comunicativo. Al inicio los participantes se ponen en ronda, Pablo Buela cuenta cómo surgió "Paseo a ciegas" y un representante de la UNCU informa sobre la institución. Luego se designan las parejas y comienza el trayecto de 200 metros.
"Busqué incentivar la comunicación, poder conocer al otro y que durante la caminata aparezca el diálogo entre la persona ciega y la vidente. Por lo general la segunda busca interiorizarse en la vida del otro y entenderlo", dijo el impulsor.
Sobre las emociones que surgen luego de compartir el trayecto, Buela contó que los ciegos manifiestan mucha alegría al saber que un grupo de personas se toman un rato para prestarles atención y ayudarlos a difundir su problemática. Quienes pueden ver, por su parte, "muestran emoción, hay personas que han llorado... emoción porque te cae la ficha de lo agradecidos que tenemos que ser por no tener esa dificultad".
"El mayor desafío no es caminar a ciegas, sino enfrentarse a la realidad que vive el otro. Uno sale pensando que no se puede quejar de nada", concluyó.
La actividad, que fue pensada para hacerse en verano, a pesar del frío seguirá en invierno y su promotor está definiendo lugares cerrados como un shopping o supermercados para continuarla.
Además de ser el director de la agencia digital Pimod, Pablo Buela lleva adelante "Grafitteo" -un proyecto que busca embellecer Montevideo creando murales artísticos en vallados o muros de edificios en construcción- y "Paseo a ciegas", dos iniciativas sin fines de lucro que según confiesa el emprendedor nada tienen que ver con lo empresarial. "Son actividades que me hacen feliz, surgen del deseo de hacer cosas que me dejen contento".
Buela, que está buscando recaudar fondos para UNCU y ayudarlos en su difusión, reconoció a Montevideo Portal que gracias a su formación y sus vinculaciones "es más fácil generar cosas que para ellos desde el anonimato es complicado".
María Magdalena Prado
Montevideo Portal
No hay comentarios.:
Publicar un comentario